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J. Carlos Palacios / La Paz
El Estado boliviano está por debajo de 11 naciones de la región en lo que concierne a prevención y detección temprana, organización de la lucha contra el cáncer y tratamiento de esa enfermedad.
Este criterio se desprende de mediciones cuantitativas y análisis cualitativos contenidos en el informe «Control del Cáncer, acceso y desigualdad en América Latina, Una historia de luces y sombras, elaborado por Economist Intelligence Unit (EIU) (unidad de negocios independiente dentro del grupo The Economist, publicación semanal en lengua inglesa).
El informe se centra en 12 «países de estudio de América Central y América del Sur escogidos por diversos factores, entre ellos el tamaño y el nivel de desarrollo económico: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay.
El documento señala que se presenta un trabajo de investigación para calificar el desempeño de los 12 países que componen el estudio en diferentes áreas de relevancia directa con respecto al acceso para el control del cáncer.
El informe contiene, además, un análisis de información de varios organismos internacionales y de entrevistas realizadas a 20 prestigiosos investigadores a nivel mundial.
En lo que concierne al acápite «Plan estratégico: supervisión del desempeño, disponibilidad de medicamentos, disponibilidad de radioterapia: prevención y detección temprana y finanzas (apoyo financiero y la inversión para ayudar a las personas a acceder a la atención del cáncer), Bolivia tiene un registro de 7 puntos sobre 30, Paraguay tiene 9 y el resto de naciones está por encima de los 14 puntos.
Los autores del estudio aclaran que el objetivo de esta calificación no reside en asignar una «puntuación solamente, sino en trazar un bosquejo, a grandes rasgos, de las fortalezas y debilidades de los países del estudio y la región en su conjunto. «De este modo, los resultados se convierten en un punto de partida útil para el debate sobre el control del cáncer y el acceso a la atención del cáncer en América Latina, añaden.
En lo que corresponde a la existencia de un Programa nacional de control del cáncer (NCCP), concepto definido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como: «un programa de salud pública encaminado a reducir la incidencia y la mortalidad de los tumores malignos y mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer, Bolivia obtiene su mejor desempeño en todo el estudio, a partir de calificaciones que establecen una escala de 1 para lo peor y 5 para lo mejor. Bolivia registra un 1,7, detrás de Panamá y detrás de Argentina que logra un 0,8. mientras que las otras naciones están con un rango que oscila entre 2,5 y 5. Los investigadores también aclaran que «tener un programa no implica que el mismo sea cumplido y muchas veces tales planes terminan en un archivo.
Sobre la información que tiene cada país sobre mortalidad por cáncer, existe un registro de baja, media y alta; la investigación señala que de los 12 países investigados, cuatro cuentan con datos de baja, pero añade que «Bolivia no posee ningún tipo de información confiable.
Sobre el parámetro de disponibilidad de determinados fármacos contra el cáncer y de la morfina para aliviar el dolor, así como el acceso a radioterapias, el Estado boliviano registra un desempeño bajo: 0,7, es decir por debajo de 1 que es el «peor desempeño sobre un total de 5 como mejor desempeño.
Lo propio en cuanto a «asistencia financiera e inversiones existentes para ayudar a la gente a cubrir los costos de la atención del cáncer, en que obtiene 0,5 por debajo de 1 (lo peor) sobre un máximo estimado de 5 puntos.
Frenaron los males habituales
El estudio explica que los Estados de la región han hecho esfuerzos durante décadas en materia de salud pública, cuyos objetivos solían ser la atención materno infantil y la vacunación, redujeron notablemente el impacto de otras enfermedades concretas y la mortalidad ocasionada por la diarrea, las infecciones de las vías respiratorias inferiores y enfermedades neonatales. «Los sistemas de salud en América Latina son víctimas de su propio éxito en muchos sentidos. Porque han abordado los problemas de salud que requieren soluciones más simples, ahora deben enfrentar enfermedades crónicas y no transmisibles más complejas, como el cáncer, indica una parte.
Un mal que será epidémico
El cáncer ya es la segunda causa de mortalidad en América Latina, y la carga económica que exige esta enfermedad se incrementará notablemente en los años venideros.
En los 12 países del estudio, el cáncer es el causante del 19% de las muertes en promedio, y en dos países es el responsable de un cuarto o más de la mortalidad.
En gran medida, debido al envejecimiento y al crecimiento de la población, la incidencia de cáncer y la mortalidad (si no se hace algo al respecto) en América Central y América del Sur seguirán aumentando marcadamente en lo que va desde el 2012 y hasta el 2035.
Se prevé que la cantidad de casos aumentará en 91 % durante este período, y los casos de muerte a causa de cáncer aumentarán en 106 %.
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