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Científicos del Instituto Nacional de Salud en Bethesda (Maryland, Estados Unidos), lograron lo que hasta ahora era considerado imposible: erradicar por completo el cáncer de mama avanzado en una mujer.

El caso fue presentado este domingo por la revista Nature Medicine, donde según relatan los médicos, los tumores  de una paciente que ya había hecho metástasis, desaparecieron por completo luego de poner en práctica un tratamiento innovador.

Se trata de Judy Perkins, una ingeniera de Florida de 49 años, quien de acuerdo a los diagnósticos, tendría dos o tres meses de vida.

Sin embargo, al practicarle un tratamiento que consiste en reactivar  las células T del organismo, (que ayudan a proteger el cuerpo de las infecciones, inyectando anticuerpos), logró superar de manera excepcional la enfermedad.

El tratamiento consistió en cortar pequeños trozos de tejido de los tumores de su ADN para encontrar las mutaciones específicas de su cáncer.

Luego, los médicos cultivaron miles de células inmunes en el laboratorio e identificaron cuáles destruirían las células cancerosas de la mujer. De esta manera, inyectaron 80 mil millones de células inmunes en el cuerpo de Perkins que, luego de 42 semanas, demostraron que estaba completamente libre de cáncer. Perkins ha permanecido así desde entonces.

Su caso representa una gran noticia para el mundo de la ciencia, pues esta es la primera vez que una paciente con cáncer de mama avanzada es tratado con éxito. El secreto de la inmunoterapia, dicen los expertos, es que utiliza las propias células inmunes del paciente para encontrar y destruir las células cancerosas que se han formado en el cuerpo.

“Es un milagro, y estoy más que sorprendida de que haya estado libre de cáncer durante dos años”, dijo Perkins a los medios, quien además, asegura que antes de empezar el tratamiento ya se estaba preparando para la muerte.

“Había renunciado a mi trabajo y estaba planeando morir. Tenía una lista completa de cosas que tenía que hacer antes del final, como ir al Gran Cañón “, aseguró. “Ahora, he vuelto a la vida cotidiana normal“.

Laszlo Radvanyi, director científico del Instituto de Ontario para la Investigación del Cáncer, que no participó en el tratamiento de Perkins, dijo que su caso era “una respuesta sin precedentes en el cáncer de mama avanzado”.

Sin duda, el caso de Perkins aviva las esperanzas de que la terapia funcione en otros pacientes con cáncer de mama avanzado, pero también en otros tipos de cánceres difíciles de tratar como el de ovarios y próstata.

 “Estamos en la cúspide de una gran revolución para finalmente lograr el objetivo de poder atacar la gran cantidad de mutaciones en el cáncer a través de la inmunoterapia”, dijo Radvanyi. Sin embargo, los expertos  advierten que el tratamiento solo se ha demostrado en una mujer y que los ensayos clínicos son necesarios para ver qué tan efectiva podría ser la terapia en otros pacientes con cáncer. Artículo tomado de Semana.

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